Palacio y el parque de Versalles, Francia
Criterio para ser considerado patrimonio de la humanidad: Genio creativo humano; Intercambio de valores; Relacionado con acontecimientos materiales y/o intelectuales de importancia universal.
El Palacio de Versalles es uno de los palacios reales más famosos del mundo y sin duda uno de los más visitados. Esta compuesto por tres palacios, el jardín y un parque y se extiende en 800 hectáreas. Sus paredes y habitaciones han albergado a personalidades tan importantes como los reyes Luis XIV, Luis XV y Luis XVI, y a la controversial María Antonieta. Considerado como uno de los ejemplos de la monarquía y el lujo francés. Las recámaras y demás habitaciones se encuentran restauradas a su estado original e invariablemente causan reacciones de asombro entre los visitantes, quienes dan cuenta del gran lujo y la exageración de la realeza de siglos pasados.
Los arquitectos artífices de esta gran obra del barroco francés fueron Louis Le Vau y a Jules Hardouin Mansart y ell diseño paisajístico del jardín estuvo a cargo de André Le Notre.
Durante la visita al Palacio de Versalles se recorren una gran cantidad de estancias propias de un enorme palacio pero las más importantes y que no deben perderse son los Aposentos del Rey, los Aposentos de la Reina, la Capilla Real y sobre todo la Galería de los Espejos, una auténtica obra de arte y que además es un lugar histórico por la firma del Tratado de Versalles que puso fin a la Primera Guerra Mundial.
Los jardines también merecen una mención especial, tan inmensos que es casi imposible conocer todos sus rincones. En estos inmensos jardines es posible visitar otras estancias como el Gran Trianon o los Dominios de María Antonieta, unas construcciones más pequeñas que el palacio principal pero con un gran atractivo.
También hay que destacar el espectáculo de agua y música que se realiza en los jardines entre abril y octubre y que presentan una oportunidad única de disfrutar de una manera diferente de los maravillosos jardines.
Un poco de historia: El Palacio de Versalles, símbolo del absolutismo y real, fue construido por orden del rey Luis XIV que instaló en él la corte y gobierno de Francia en 1682 y en él vivieron todos los reyes de Francia hasta la Revolución Francesa en 1789. Durante su reinado se acondicionaron los grandes aposentos del Rey de los de la Reina y por supuesto la sala más impresionante del palacio, la Galería de los Espejos. Con Luis XV se construyeron la capilla y la ópera.
Tras la Revolución Francesa, el palacio perdió su papel de sede del gobierno y posteriormente pasó a ser el Museo de la Historia de Francia por lo que alberga una gran cantidad de lienzos que recogen la historia francesa.
Datos curiosos: Algo curioso que comentar a cerca de la obra monárquica más importante de Francia es que dentro de lo que se constituye el palacio principal no existe cuarto de baño, son sucesiones de habitaciones destinadas a bailes, comedores y dormitorios. Ademas de ser uno de los palacio más grandes del mundo, con más de 700 habitaciones, 2000 ventanas, 1250 chimeneas, 67 escaleras y más de 1800 hectáreas de parque.
Otra dato curioso es, que en el año 1685 unas 36 mil personas y 6 mil caballos comenzaron los trabajos de construcción del Palacio, el cual se completó en 50 años y el Rey Sol, Luis XIV de Francia, empezó a bombear el agua del Sena para crear lagos y uno artificial tras el palacio de Versalles y también utilizar el agua del río para regar un importante invernadero.
El Palacio de Versalles abre todos los días excepto los lunes, días festivos nacionales en Francia o cuando ceremonias oficiales tienen lugar en el palacio. Su horario es de 9:00 am a 5:30 pm (en verano hasta 6:30 pm).
El Palacio de Versalles fue declarado Patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1979.
Fuente: http://www.visitandoeuropa.com/paris/museos/versalles.html Entre otros...